miércoles, mayo 27, 2009

La directora visita Lisboa

La semana pasada, la directora del Instituto Cervantes, Carmen Caffarel, visitó el centro de Lisboa con motivo del homenaje a nuestro anterior director, Ramiro Fonte, fallecido tristemente el pasado 11 de octubre.

Ramiro Fonte fue un director amable y respetuoso con el trabajo de todos sus profesores. De los colaboradores decía que éramos los que manteníamos el grueso de la actividad académica y que no entendía el porqué de nuestra precaria e injusta situación laboral, mantenida y promovida, contra toda lógica, por el propio Estado. Nos consta que en más de una ocasión así lo comunicó en Madrid. Pero Ramiro Fonte era un poeta, y no un hombre de gestiones. Y así, sus buenas intenciones se perdieron con él. Desde aquí queremos agradecer públicamente su apoyo y enviarle un abrazo a su familia.

Ahora, durante la visita de la Sra. Caffarel, nuestro representante sindical y un grupo de compañeros, aprovechamos para hablar con ella y entregarle una carta donde se recogían las principales necesidades y urgencias que tiene el centro, entre ellas, obviamente, la regulación laboral del 75% del personal docente, que sigue trabajando con contratos mercantiles ilegales, y privados de cualquier tipo de cobertura sanitaria o social.

No se piden contratos indefinidos. Basta con que se regularice la situación y se reconozca el vínculo laboral existente entre el IC y los profesores colaboradores: ¿contratos temporales?, ¿fijos-discontinuos?... Sin duda, habrá que estudiar y discutir las distintas opciones hasta encontrar una solución. Pero, prolongar esta precaria e injusta situación laboral más tiempo sería escurrir la responsabilidad y perpetuar el desprecio hacia nuestra labor como profesores del centro. No hacer nada contra una injusticia, le convierte a uno en cómplice de la misma.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Desgraciademnte lo que sucede en Lisboa es extrapolable al 90% de los centros. El grueso de la actividad académica la llevan a cabo los colaboradores, arrendados o como se les quiera llamar. Y esto ha sido así desde siempre. Nadie HA QUERIDO solucionar este problema. No soy muy optimista. Ojalá me equivoque

malasombra dijo...

Si nos quedamos esperando a que nos solucionen el problema, podemos esperar sentados. A nadie le han reconocido nunca ningún derecho, si antes no lo ha peleado.

Está claro que el Estado actúa como un patrón, por mucho que a Zapatero se le llene la boca cínicamente de derechos sociales. Nadie de arriba va a venir a decirnos: "nos hemos dado cuenta de que os estamos explotando y de que nos estamos aprovechando de vuestra necesidad. Ningún empleado se merece ese trato ni ese desprecio, así que hemos decidido cumplir con la legalidad: a partir de hoy mismo, todos con contratos laborales, con vuestra seguridad social, vuestro derecho a paro, un mes de vacaciones, of course, el derecho a la asociación y a la representación sindical.. y todos esos derechos laborales por los que mucha gente ha luchado durante más de un siglo, y que tan mezquinamente os hemos escatimado a lo largo de estos 18 años. Perdón por haberos ninguneado así."

:/

Anónimo dijo...

Lo que se dice en el post desde luego pinta la situación exactamente tal y como es. Y leyendo el comentario anterior a éste la verdad es que uno alucina. Aunque sean cosas que ya se saben desde hace muchos años, es que verlas así, enumeradas en una lista breve, hace que uno alucine.

Y realmente parece increíble que algo así no llegue hoy mismo a la opinión pública y que no se tome inmediatamente como un problema de estado. La institución que representa la imagen de España en el exterior.

Se les llena la boca con que representamos a España, se gastan millones en propaganda, diseños punteros, eventos de primera línea, televisión online, días del español, etcétera, etcétera. En cada discurso nos dicen, desde la Directora General hasta el último director local, pasando por el académico, que son conscientes de que el capital humano es lo más importante de la institución, y que velan por su situación; y ponen una cara que parece que de verdad se lo creen.

El Jefe de Estado presidiendo el Patronato, los cerebros más respetables del mundo hispano asistiendo a eventos publicitados a bombo y platillo, ilustres académicos y embajadores presidiendo eventos locales, y después de dieciocho años sigue habiendo lo menos mil quinientos trabajadores (y el número aumenta) acumulando contratos mercantiles que valen menos que un duro de madera, y rezándole a Santa Bárbara para que ese tobillo hinchado no sea una pierna rota, o para que este verano se apunte mucha gente a los cursos, porque si no va a haber que quitarse el hambre a guantazos; gente que empieza en diciembre la cuesta de enero y que no ha podido tomarse unas vacaciones como las que merece cualquier trabajador desde ni se sabe.

Trabajamos para un gigante con pies de barro, un precioso mueble español en el que la carcoma se ceba a diario. Y cualquier día de estos la cosa llega a los medios y se forma la de Dios. Igual serán medios extranjeros los que agarren a Aquiles por donde le duele y aprovechen este nuevo episodio de la Leyenda Negra que se les sirve en bandeja. El caso es que esto, como no arreglen pronto, reventará, y no se sabe a dónde llegará el lodo.

¿Cuándo va a venir un director que se juege el tipo, que coja el toro por los cuernos y sea políticamente consecuente? Igual cuando nombraron a la directora actual se hizo pensando que iba a poner el mismo esfuerzo que puso en RTVE para sanear el Cervantes. Desde luego, si tenía planes por el estilo, está tardando en darlos a conocer.

Anónimo dijo...

Pues yo creo que la cosa pasa por ahí, por sacarles los colores, por hacer pública de la manera más contundentemente posible lo que esconde la isntitución, ya que de otro modo no es posible, que se menee el asunto, que la cosa se airee, que llegue a cuantos más medios posibles y que tengan que explicarse, que explicarnos cómo es posible que con los impuestos de todos los ESPAÑOLES el INSTITUTO CERVANTES se dedique a EXPLOTAR al 70% de sus profesores.
La mayoría de la gente no tiene ni idea y cuanto le cuentas a algún amigo o conocido las irregularidades y los abusos laborales a los que estamos sometidos muchos desde hace tanto tiempo no dan crédito.
Pues que quede bien claro que el IC es una institución pública y del ESTADO y que de una manera bastante directa TODOS LOS ESPAÑOLES de bien que pagan sus impuestos regularmente y desde hace 18 años están contribuyendo sin saberlo a perpetuar una situación de ABUSO insostenible.

Currela del Español dijo...

Plas, plas, plas! Yo sí que me he quedado alucinado con tu comentario, anónimo. Creo que has reflejado con una sensibilidad y una precisión envidiables la frustración y el desamparo que sentimos la mayoría de los profes en los Institutos Cervantes.

Y encima, cuando caes enfermo y te tienes que quedar una semana en casa con el gripazo, y llega el jefe de estudios de turno, el neodirectivo brownnose, y te echa la bronca porque le has jodido el planning y tiene que buscarte sustituto. ¡Pero cabrito, ¿te crees que me he inyectado la gripe queriendo o que he ido por ahí abrazando mexicanos...;)? Encima de que no les va a costar un duro...

No hay un sólo colaborador que desee quedarse en la cama una semana, porque eso significa que ese mes va a sacar menos plata que un aparcacoche en el desierto de Arizona. Estamos todos con los actimels y la bufanda hasta junio para que nos cuadren las cuentas en verano.

ANISKA dijo...

Hola a todos! Estoy completamente de acuerdo con los que comentáis, pero peor aún es que escamoteen plazas en la convocatoria de cada año. ¿Qué ha pasado con las plazas de Varsovia y Francfort que anunciaban los sindicatos el viernes 29 de mayo? ¿Se han dado a dedo? ¿Se han convertido en interinidades?¿Por qué? Poca tranparencia.
Un saludo

Anónimo dijo...

Aniska no sé si es mejor o peor, lo que sí es más lo mismo. Pero no pasa nada, porque en el IC nunca pasa nada. Y todos seguimos mirando hacia otro lado y yendo a trabajar todos los días como si la cosa no fuera con nosotros. Y los de plantilla siguen sin convenio colectivo después de tantísimos años (MENUDA BARBARIDAD)tragando y callando y consintiendo que ese vacío legal les cuele una y otra vez irregularidades de lo más pintorescas. Y los colaboradores trabajando como burros, haciendo más horas que un tonto para poder sobrevivir y sin cotizar a la seguridad social y con contratos ilegales y en algunos casos hasta sin contrato y cobrando en negro al final de cada mes de una caja metálica como las que teníamos algunos hace taitantos pa guardar nuestros ahorrillos.
Pues eso, que mucha fachada de cartón piedra tras la cual se esconde no sé si uno o más de un trastero oscuro que esconde mucho mucho polvo. Pero no pasa nada porque la ilusión de la fachada está muy bien conseguida y mientras siga surtiendo efecto y manteniendo embobados a Quijotes y Sanchos varios, la cosa irá bien. Porque de eso se trata de confundir realidad y ficción, de embaucar a cuantos más mejor y por supuesto de sacar la mejor tajata del embuste, una vez más confundir molinos con gigantes y seguir haciendo honor al escritor que nos da el nombre. Aunque no sé, pero me da a mí que si Don Miguel levantara la cabeza y se asomara por estos lares no se iba a poner muy contento. Al parecer era un hombre de bien.

Los arrendados dijo...

Estamos intentando averiguar qué es lo que ha pasado con esas dos plazas que quedaron vacantes en el concurso de traslado.

Cuando sepamos algo, lo colgaremos en el blog.

Otra probable chapuza es que no habrá representación sindical en la entrevista. Al menos así se desprende de las bases de la convocatoria.

Hace poco, felicitábamos al IC por haber accedido a que representantes sindicales estuvieran presentes en el concurso de traslado. Creímos - ilusos...- que la medida sería extensible al concurso público. Mucho nos tememos que no será así. El IC seguirá apostando por la falta de transparencia: volveremos a ver casos de compañeros con excelentes currículos, altísimas notas en los exámenes y con una extraña y más que parcial valoración en la entrevista. Con suerte, les darán la última opción que solicitó. Y en el peor de los casos se quedarán sin plaza y con un plamo de narices.

Está claro que no será fácil convertir el cortijo en tierras mancomunales.

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